El Día del Champagne, la bebida que combina elegancia y sabor, fue pensado para homenajear a esas burbujas que han conquistado los paladares de todo el mundo. En esta ocasión, exploramos el origen del champagne, sus maridajes exquisitos y los cocteles que podés preparar para celebrar este día.
El champagne es una bebida que trasciende fronteras. Su historia se remonta al siglo XVII, cuando se comenzó a producir en la región de Champagne, al noreste de Francia. Este vino espumoso, célebre por sus burbujas finas y su sabor refinado, se ha convertido en un símbolo de lujo y celebración en todo el mundo.
En Argentina, el champagne se sumó a la cultura de celebración y el brindis es una parte esencial de momentos especiales, desde buenas noticias hasta casamientos.
El champagne es conocido por su versatilidad en el maridaje, lo que lo convierte en el compañero perfecto para una variedad de platos. Estas son algunas sugerencias:
Las ostras, camarones y cangrejo resaltan la frescura del champagne y realzan sus notas cítricas y minerales.
El champagne se lleva muy bien con sushi y sashimi, realzando los sabores delicados de estos platillos.
Platos como el pollo asado se benefician de la acidez del champagne, creando un equilibrio perfecto.
Los quesos suaves y cremosos, como el brie o el camembert, son ideales para acompañar el champagne, ya que la acidez corta la grasa y realza los sabores.
Frutillas, frutas cítricas y melones son excelentes opciones para acompañar el champagne en postres.
El champagne también es una base ideal para la creación de cocteles sofisticados. Te presentamos algunas ideas para celebrar el Día del Champagne: